El Día de la Batalla de Boyacá se celebra el 7 de agosto de cada año.
Esta fecha recuerda al enfrentamiento ocurrido el día 7 de agosto de 1819 entre el Ejército Libertador, liderado por Simón Bolívar, y las tropas invasoras de la división realista española, quienes tenían como misión tomar el territorio de Santa Fe de Bogotá.
Historia de la Batalla de Boyacá
Napoleón Bonaparte destituyó al rey de España Fernando VII en lo que, históricamente, se conoce como las Abdicaciones de Bayona en 1808.
En 1814 Fernando VII recuperó el trono y, con ello, el dominio de las tierras suramericanas, que habían optado por el autogobierno.
El rey emprendió una campaña de reconquista y control económico formando el Ejército Realista en América, el cual, tenía como fin, someter los territorios Hispanoamericanos al control monárquico español.
La batalla consistió en la lucha territorial entre dos bandos. Por un lado, el Ejército Realista, en defensa de la monarquía. Por otro lado, el Ejército Independentista, a favor de la autodeterminación.
La Batalla de Boyacá, pintura de J.W. Cañarete (1919). La victoria de Boyacá, en manos de los patriotas, aseguró el dominio sobre el territorio neogranadino en la llamada Campaña libertadora.
Propósito y composición del Ejército Realista
Los Realistas intentaban conquistar el territorio de Santa Fe de Bogotá. Para ello, aprovecharon como vía de acceso el puente de Boyacá, en el camino Real. Su único fin era llegar a la capital del virreinato y apropiarse del poder.
La tercera división del Ejército Realista estaba comandada por el jefe del estado mayor, el coronel Sebastián Díaz, también por el general José María Barreiro y por el coronel Francisco Jiménez.
Objetivo y formación del Ejército Libertador
El Ejército Libertador, organizado y liderado por Simón Bolívar, trató de impedir a toda costa el propósito del Ejército Realista.
Los rebeldes, ayudados por el Francisco Paula Santander y por el general José Antonio Anzoátegui, contaron un total de 2.850 hombres, los cuales eran en su mayoría neogranadinos y venezolanos, criollos, mestizos, zambos, a quienes los Realistas llamaban insurgentes.
Inicio de la movilización y batalla en Boyacá
El sábado 7 de agosto, la movilización de las tropas Realistas comenzó desde Motavita. Bolivar se percató de este movimiento desde el Alto de San Lázaro, al oeste de la capital de Tunja. Después, ordenó la marcha de su ejército con la idea de bloquear el paso hacia la capital.
Las fuerzas se encontraron en el campo de Boyacá, donde los Independentistas tomaron por sorpresa a los Realistas, un par de horas después del mediodía.
Allí, las tropas se enfrentaron arduamente. Los Independentistas, que tenían ventaja, lograron bloquear todos los frentes enemigos y encerrarlos estratégicamente.
Triunfo del Ejército Libertador
A las tres de la tarde la acción bélica era intensa, las fuerzas del Ejército Libertador estaban unidas y tenían facilidad en sus comunicaciones. Por su parte, a diferencia de las anteriores, las fuerzas del Ejército Realista estaban bloqueadas y sin posibilidad de estrategias comunes. Este hecho fue clave y ayudó a ganar la batalla sin mayores pérdidas del lado de los patriotas.
La batalla finalizó con la rendición de los 2.670 soldados nativo-americanos que conformaban el Ejército Realista.
Consecuencias de la Batalla de Boyacá
Puente de Boyacá situado en Tunja (Colombia), donde tuvo lugar la batalla, visto en la actualidad.
La Batalla de Boyacá significó un evento histórico que debilitó el poder español en Nueva Granada. La conquista de Boyacá puso en manos de patriotas neogranadinos y venezolanos el poder de la capital: Santa Fe de Bogotá.
Este hecho abrió paso para la unión de la Nueva Granada con la Capitanía General de Venezuela, formando una sola nación llamada República de Colombia o Gran Colombia, como también se le conoce históricamente. A ella, posteriormente, se unirían Panamá, Quito y Guayaquil en 1821 y 1822.